Frente a las costas de Cala d´Hort, encontramos una de las vistas más icónicas de Ibiza: el islote de "Es Vedrà" y, junto a él, "Es Vendranell".
Con una altitud de 382m de altura, esta isla salvaje se levanta frente a nuestros ojos cautivando a todos los que la visitan. “Es Vedra” debe ser una de las zonas más fotografiadas de Ibiza y, personalmente, nunca me canso de mirarla a través de mi cámara. Aunque los atardeceres son un espectáculo natural que ningún visitante de la isla debe perderse, cualquier hora del día es buena para dirigir nuestra mirada hacia "Es Vedrà".
“Es Vedra” y “Es Vedranell”, de 128 metros de altura, pertenecen a la reserva natural de Cala d´Hort ("Reserva Natural es Vedrà, es Vedranell i els Illots de Ponent") desde el año 2002 por la riqueza y la peculiaridad de su flora y su fauna, y sólo se pueden pisar los islotes con autorización.
Si lo quieres ver de cerca, no se te ocurra ir nadando, ya que la distancia desde la costa es de 2 kilometros. La mejor manera es con alguna de las barcas de recreo que salen de un pequeño embarcadero de "Cala d'hort" y ofrecen un bonito paseo que rodea los dos islotes. Si te gusta bucear, no pierdas la oportunidad de visitar su fondo marino. En la parte más alejada de la costa de Ibiza, las paredes verticales del islote se prolongan dentro del mar y es todo un espectáculo.
Antes de ser declarado parque natural, "es Vedrà"sólo estaba habitado por las cabras de algunos payeses y mucho antes, en el año 1854, por el Padre Francesc Palau, que fue fundador del monasterio de las carmelitas en Es Cubells y pasaba en el islote largas temporadas de soledad y recogimiento.
"Es Vedrà" tiene su parte de mito y de magia. Muchas leyendas y misterios lo tienen como protagonista, apariciones de Ovnis y cuentos populares, entre las más famosas. Existe la creencia de que es uno de los vórtices energéticos del planeta y que forma parte de un triángulo magnético similar al Triángulo de las Bermudas. Existen multitud de historias de palomas mensajeras que, en la zona, pierden su prodigioso sentido de la orientación y de instrumentos de localización de barcos o aviones que han dejado de funcionar al pasar cerca del islote.
Pero quizás, la imagen que dio a conocer "Es Vedrà" al mundo fue la fotografía de la portada del disco “Voyager” que el músico Mike Olfield editó en 1996. En la portada del disco aparece el músico y, detrás suyo, la sugerente silueta de "Es vedrà". Por el ángulo de visión, la fotografía se realizó cerca del mirador que hay en el camino hacia la Torre de defensa de “Es Savinar”.
Para llegar al mirador y también para subir a la torre debéis coger el camino de tierra en la curva que hay antes de empezar la bajada a Cala d'Hort. Podéis entrar un trozo con el coche, pero a mitad del camino, tendréis que aparcar y seguir a pie durante unos pocos minutos. Vale la pena, os lo aseguro. Tened la precaución de no dejar nada de valor en el coche, no os llevéis una sorpresa y, por supuesto, no os acerquéis mucho al borde del acantilado. No se sabe hasta que punto las leyendas tienen alguna base científica, pero sí es cierto que la visión del islote fascina a todo el mundo y que el sitio tiene una energía especial.
Gracias por el artículo. Os dejamos aquí la historia de un náufrago que rescatamos el verano pasado con nuestro barco, que se había despeñado de los acantilados. Probablemente le savamos la vida... http://www.charteralia.com/blog/el-rescate-del-naufrago/
ResponderEliminarUna relato emocionante, Jose. No sé si el naufrago fue consciente, pero si no llega a ser por vuestra intervención, su aventura hubiera terminado mucho peor. Ójala la legendaria fraternidad en el mar, funcionase también en tierra firme.
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